Los usuarios buscan cada vez más un ahorro considerable en las facturas e instalaciones eléctricas. Por esta razón, las Comunidades Autónomas, auspiciadas por el Gobierno central, ofrecen subvenciones para el autoconsumo. Estas ayudas son cada vez más comunes entre, sobre todo, los materiales que captan energía mediante sistemas de captación de recursos renovables, pues suponen una fuente inagotable y gratuita que ofrece la naturaleza y que se encuentra al alcance de todo el mundo.
El desarrollo del autoconsumo permite que se haya tomado conciencia de sus beneficios, tanto, que su aplicabilidad fomenta un ahorro de hasta el 50%. Si bien estos sistemas de energía pueden resultar más caros que la media usual en el mercado, a la hora de adquirir una instalación es muy importante reconocer las características de la casa. No vale con escoger el más barato, pues puede que no se adapte a las necesidad de nuestro hogar y, en el futuro, produzca facturas con importes más elevados de lo que debería
En definitiva, hay que considerar que se trata de una inversión en la que se podrá ver a medio y corto plazo su reembolso en forma de reducción en las condiciones de la factura. Las energías renovables, por ejemplo, no pagan los correspondientes impuestos que establecen las respectivas CC. AA ni alquileres de calderas, porque su cometido consiste en garantizar la eficiencia energética mediante el consumo de sistemas que lo permiten.
¿Quién puede solicitar ayudas económicas para las instalaciones de suministros?
Es evidente que sólo aquellas instalaciones que promuevan el autoconsumo serán aquellas que se pueden beneficiar de este tipo de bonificaciones. Para que esto sea posible, el cliente debe ostentar una serie de documentos que lo acrediten y corrobore:
- Presupuesto del montaje
- No haber solicitado con anterioridad una subvención, pues solamente se ofrece una subvención por vivienda.
- Cumplir con los mínimos y máximos exigentes en relación a la potencia contratada
- Además, el propietario del inmueble precisa una aprobación previa de la empresa instaladora.
En tanto que se cumplas estas características, cualquier persona de cualquier casa es apta para solicitar las ayudas por autoconsumo: desde viviendas unifamiliares, pasando por comunidades de vecinos que deseen realizar una instalación de placas fotovoltaicas que garanticen un ahorro en luz visible en las facturas mensuales. Desde hace unos años la Ley contempla la posibilidad del autoconsumo compartido, una forma de instalar placas solares en los exteriores del bloque de pisos para el beneficio de todos los integrantes.
¿Qué tipos de subvenciones para el autoconsumo existen?
Con la intención de cubrir los plazos fijados por la Unión Europea en materia de conservación y preservación del medio ambiente, el Gobierno ha establecido al menos dos tipos de subvenciones fundamentales:
- Las ayudas sobre el precio de instalación: estas dependen de lo que se establezca a nivel comunitario y su cantidad oscila entre los 3.000 y los 4.500 euros. Este tipo de bonificaciones se aplican sobre el precio total de la instalación y, en determinados casos, no se aplican sobre el Impuesto de Valor Añadido (IVA). No obstante, hay que tener en consideración que este tipo de descuentos se ofrecen cada ciertos periodos de tiempo, en función de cómo gestione los presupuestos cada CC. AA.
- Subvenciones sobre los impuestos del estado: se deben solicitar en el Ayuntamiento correspondiente del municipio al que cada interesado pertenezca y se puede tramitar bien de forma telemática como presentándose de forma física. Este acuerdo presenta una ayuda de entre el 30 % y el 50 % para el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) entre 3 y años que puede establecerse el periodos.
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