¿Qué es esto del Big Data? Esta es una de las palabras que más está sonando últimamente en el sector tecnológico en general. Pero, ¿por qué? ¿A que se refiere? El objetivo de este artículo es explicarte a qué se refiere este término y cómo puede ayudarte en diferentes aspectos de la vida diaria como por ejemplo en el sector energético.
La recolección de datos ha existido desde siempre pero para entender la magnitud que ha alcanzado en los últimos años podemos decir (según la revista Forbes) que entre los dos últimos años se han obtenido más datos que en toda la historia de la humanidad.
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¿Qué es el big Data?
El término Big Data hace referencia al conjunto de datos recopilados de gran volumen con el objetivo de ser analizados en busca de información determinada u oculta y encontrar patrones que, dependiendo del nicho, nos permitirán optimizar los procesos productivos de cualquier proyecto.
Este volumen de datos es imposible de gestionar o procesar mediante procedimientos convencionales debido a tres motivos: el gran tamaño o volumen de datos, la dificultad en su obtención, y la velocidad en su crecimiento.
La complejidad del Big Data viene dada principalmente por la dificultad que supone recopilar datos de diferentes orígenes de forma no estructurada, es decir, el Big Data recoge datos que pueden provenir de diferentes fuentes tecnológicas como el NFC, dispositivos GPS, teléfonos inteligentes, redes sociales, registros de llamadas, de los sensores de los dispositivos, hábitos de navegación en la web del negocio, etc.
La importancia del Big Data para las empresas
Los objetivos a conseguir mediante el uso de Big Data pueden ser tan variados como la capacidad de identificar nuevas oportunidades por parte de la empresa o modelo de negocio.
La forma de conseguir el éxito por parte de las empresas usando el Big Data lo podemos resumir en los siguientes puntos:
El Big Data permite tomar mejores decisiones
La tecnología Big Data permite dejar de lado la “intuición” para tomar decisiones basadas en datos con alta probabilidad de acierto gracias al estudio del comportamiento de los clientes.
Esta tecnología nos permite profundizar en la manipulación de datos pudiendo combinarlos para segmentar perfiles, realizar campañas de marketing y centrar la publicidad en clientes potenciales.
Nuevas oportunidades de negocio
Como ya sabemos todos, la información es poder, por ello el Big Data nos permite crear nuevas fuentes de ingresos basadas en los perfiles de nuestros clientes. Hablamos por ejemplo de la posibilidad de nuevas estrategias como la venta cruzada mediante la personalización de productos o servicios.
Ahorro de costes
La gestión de esta inmensa capacidad de datos ha provocado que a las empresas no les compense escalar más sus sistemas de hardware y plantearse trabajar en la nube, esto además de suponer un ahorro para la compañía hacer que la manipulación de estos datos sea más ágil y accesible por cualquier empleado de la empresa.
Mejorar la satisfacción del cliente
En la actualidad el cliente es el foco de cualquier marca o empresa, por ello, la satisfacción del cliente y la fidelización del mismo toma gran importancia si queremos conseguir una marca con buena reputación.
En este aspecto el Big Data toma gran protagonismo ya que gracias a conocer los hábitos del cliente o poder acceder a información como reclamaciones y quejas se pueden afrontar los problemas y ponerles soluciones personalizadas en cada caso que permitan aportar valor y credibilidad a la marca.
El Big Data en el sector energético
En el campo del sector energético, y en la mayoría de los casos heredado por nuestros padres, nos hemos acostumbrados a que nos llegue la factura de luz sin ni siquiera pararnos a revisar los costes que la integran y sin plantearnos si estos se pueden reducir o no ya que no tenemos medios ni información como para contrastarla o comprenderla.
En poco tiempo, gracias a la obligatoriedad de la instalación de contadores inteligentes y el Big data tendremos la oportunidad de conocer nuestros consumos día a día.
Por otro lado, las empresas distribuidoras podrán detectar, además de problemas en el abastecimiento, posibles fraudes por parte de los usuarios.
Las empresas productoras y comercializadoras podrán tener más datos que les permitirá ajustar la compra y venta de energía gracias al conocimiento de consumo de sus clientes.
Las comercializadoras podrán ofrecer a sus clientes consejos y mejoras como cambios en la potencia contratada o quizá una tarifa eléctrica que se adapte de mejor forma a sus consumos permitiendo que el usuario ahorre la mayor cantidad de dinero posible.
En conclusión, el Big Data es la tecnología que ha llegado para cambiar la forma de ver la relación marca – cliente en favor de la optimización de los recursos de las compañías y la personalización hacia las necesidades del cliente.