Hasta ahora sabemos que para salvar y proteger el medioambiente, no importa si eres una persona común y corriente o la máxima autoridad del gobierno de un país, todos podemos llevar a cabo numerosas acciones para alcanzar dicho objetivo. Por ello, no importa si no puedes elaborar y aplicar importantes leyes que cambien el rumbo ecológico de toda una nación. Todos y cada uno de nosotros podemos adoptar una serie de cambios en nuestros hábitos diarios para salvaguardar nuestro planeta.
Estas acciones o cambios pueden ser tales como dejar de consumir plástico, reutilizar y reciclar el papel, cambiar nuestras bombillas por tecnología led, utilizar el transporte público, elegir una tarifa de luz verde, etc. Hay infinidad de formas de reducir nuestra huella ecológica pero ¿sabías que los edificios que te rodean o el hogar en el que vives también dejan su impronta en el medioambiente? Descubre con nosotros las construcciones más eficientes del mundo: los edificios de consumo casi nulo.
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¿Qué es un edificio de consumo casi nulo?
Un edificio de consumo casi nulo, EECN o «Nearly Zero Energy Building» en inglés, es una construcción que no consume prácticamente nada de energía proveniente de una fuente exterior y ajena al propio edificio. La clave de este carácter extremadamente autónomo y eficiente está en que toda la energía necesaria para satisfacer las necesidades del edificio y de sus inquilinos se produce en la misma construcción, gracias a sus cualidades y a los diferentes métodos de generación de energía renovable con los que cuente.
Pero el concepto de edificio de consumo casi nulo no es tan nuevo como crees, en realidad es la evolución y el resultado lógico de las primeras casas diseñadas a mediados del siglo pasado por otra conocida disciplina ecológica, la arquitectura solar. Estas casas basaban su diseño y su construcción con un claro objetivo en mente: el aprovechamiento de la energía solar en todas sus manifestaciones. De esta forma, la arquitectura solar conseguía unir la energía solar pasiva mediante el uso de unas materiales determinados con la energía solar activa y la instalación de placas fotovoltaicas.
El edificio de consumo casi nulo supone una forma más de luchar contra las problemáticas que azotan al medioambiente como el consumo excesivo de combustibles fósiles y la acumulación de gases nocivos y de efecto invernadero en nuestra atmósfera, envenenando el aire que respiramos y provocando cambios climáticos que pueden llegar a ser catastróficos.
Diseño y construcción tradicionales vs. Diseño y construcción alternativos
La principal diferencia entre los edificios de consumo casi nulo y los edificios que no son eficientes a la hora de ser diseñados y construidos reside en que, en el modelo tradicional, lo más importante era abaratar los costes inmediatos de la construcción, sin importar los costes a largo plazo del edificio ni su eficiencia energética.
En cambio, el disciplina de diseño y construcción de edificios de consumo casi nulo apuesta por un modelo en el que lo importante no es abaratar los costes iniciales de la construcción; en este caso se acepta una subida de dichos costes a cambio de una eficiencia muchísimo mayor. Y es que en el futuro, estos edificios apenas demandarían coste alguno en lo que a necesidades energéticas o funcionamiento se refiere. De esta forma, se amortiza un coste inicial más alto de lo acostumbrado y ayudamos al medioambiente adoptando un consumo energético mucho más eficiente y sostenible.
Los edificios de consumo casi nulo y el autoconsumo
Anteriormente dijimos que los edificios de consumo casi nulo no demandan energía de fuentes ajenas porque se encargan ellos mismos de producirla. Pero ¿cómo lo hacen? La respuesta es que estos edificios incorporan sistemas de autoconsumo de energía eléctrica como los ya conocidos paneles solares fotovoltaicos y aerogeneradores de tamaño reducido.
En el caso de aclimatar la vivienda, el edificio de consumo casi nulo opta por tácticas un poco más pasivas, pues estas construcciones se apoyan sobre todo en los materiales que se utilizan para levantarlo, materiales con una masa térmica mayor que les permite absorber el calor de forma más eficaz.
Como ves los edificios de consumo nulo son la forma perfecta de salvaguardar el medioambiente comenzando por el diseño de tu propia vivienda, construcciones que no solo son capaces de consumir energía renovable sino que además se diseñan para que apenas afecten el medio que les rodea. Puede que de momento no vivas en un EECN pero si quieres comenzar a proteger nuestro planeta, prueba por encontrar tu tarifa de luz limpia perfecta gracias a los comparadores de luz.