Por si no lo sabías, el aire acondicionado genera un ambiente demasiado frío y seco, consumiendo una barbaridad. ¡Pero no solo eso! También puede provocar alergias, problemas respiratorios, asma, sequedad en la piel… Si tú también buscas otra opción, hoy te ofrecemos las mejores alternativas al aire acondicionado.
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Ventiladores, de las mejores alternativas al aire acondicionado
Ya sea de suelo, techo o niebla… ¡Un ventilador se convierte en tu mejor alternativa! Pueden redistribuir el aire de manera que ofrecen una sensación de frescura, sin resecar el ambiente, bajando la temperatura hasta 4ºC. Y lo mejor de todo… ¡Olvídate de los problemas de sequedad!
Todo esto sin olvidar que el consumo de un ventilador es mínimo comparado con el aire acondicionado. Ahorra más este verano sustituyendo tu aire por ventiladores. ¡Consumen un 30% menos que un aire acondicionado! Es la opción más respetuosa con la salud y el medioambiente.
Suelo térmico de agua, otra opción
¿Sabes que este es uno de los sistemas más eficaces que existen? Seguro que has escuchado alguna vez del suelo radiante pero… ¿Sabes que también existe una opción fría? Esta no es una opción económica pero sí que es definitiva. Instalando tubos bajo el suelo para que circule el agua, podemos conseguir nuestro ansiado confort en verano.
El agua circula a 18ºC por el suelo, absorbiendo el calor de la vivienda y ofreciendo esa sensación de frescor que tanto deseamos. Con este suelo reducimos hasta un 20% el consumo de energía. Sin corrientes de aire, evitando el polvo en suspensión y posibles problemas. ¡Son todo ventajas!
Pero tal vez te estés preguntando si merece la pena… No te preocupes, tu suelo también puede hacer la función de calor. Ahorra tanto en calefacción como en aire acondicionado con él. ¿No es genial?
Utiliza un deshumidificador
Ese pequeño aparato que elimina la humedad… ¿Tienes idea de lo útil que puede ser? Reduciendo la humedad de tu entorno puedes reducir hasta 4ºC en la temperatura ambiente. Cuando un lugar está más seco, el calor o el frío se notan mucho menos. ¿No te ha pasado nunca?
Aisla bien tu casa y aprovecha el entorno
Una de las mejores alternativas al aire acondicionado —y cualquier tipo de aparato, ya sea frío o calor— empieza por un buen aislamiento. ¡Un aislamiento te puede ayudar a ahorrar más de un 30% en tu factura!
¿Alguna vez has oído hablar de la arquitectura bioclimática? Se trata de una técnica empleada para contrarrestar el calor aprovechando las formas, composición, materiales y el entorno donde se encuentra. Cosas tan simples como pintar la vivienda de colores claros, proteger patios interiores con vegetación o usar protección para evitar la entrada de rayos en la casa.
Pero no nos olvidemos de que también es importante revisar el interior. Un buen aislamiento hará tu casa más cómoda tanto en invierno como en verano. ¿Has visto que en las casas antiguas siempre hace calor en invierno y fresco en verano? Eso es porque gracias a sus gruesos muros, están bien resguardadas.
Utiliza la naturaleza e instala un techo verde
¿Conoces los techos verdes? Seguramente te suene raro pero… ¿Sabes que data del año 500 A.C? Este se convirtió popular en los 60 en Europa, extendiendo su uso por los Estados Unidos. Este tipo de tejado reduce la contaminación, polvo y el calor que entra en la vivienda. ¿No te gustaría tener uno? ¡También reduce la necesidad de gestionar el agua de lluvia!
Una cubierta o techo verde se trata de un sistema en el que crece vegetación, ¡en nuestro tejado! Las plantas pueden ser modulares o tener capas drenantes. Todas tienen algo en común: impermeabilidad y repelente de raíces, manteniendo la estructura segura y evitando que se produzcan daños.
Existen varios tipos de techo verde dependiendo de la densidad, sustrato y tamaño. Un techo verde extensivo implica más trabajo, ¡imagina un jardín en tu tejado! Por otro lado, un techo extensivo es uno que se deja crecer de forma natural sin restricciones. Se autogestionan, igual que en la naturaleza. Solo necesitas fertilizar y deshierbar una vez al año, ¡mucho más sencillo!