¿Sabías que es posible producir electricidad, calor y frío de forma casi simultánea y utilizando un único combustible? Esta suerte de oferta 3×1 en energías es posible gracias a la trigeneración, ingenioso sistema que se cimienta sobre la máxima eficiencia energética.
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¿En qué consiste?
La trigeneración o «trigen» consiste en un proceso por el cual es posible obtener tanto energía eléctrica —o mecánica— como calor y frío, todo a partir del uso de un solo combustible o fuente de energía.
Este sistema de producción nace de la cogeneración y de la generación de energía «in-situ», que consiste en la producción de energía a una escala menor y lo más cerca posible del consumidor final de dicha energía. Pero ¿qué es la cogeneración?
La cogeneración
Este precedente de la trigeneración no es otra cosa que un sistema capaz de producir y explotar dos tipos de energía —eléctrica y térmica— a partir del uso del mismo combustible.
La cogeneración —al igual que la trigeneración— se utiliza, sobre todo, en el sector industrial —industrias farmacéuticas, alimentarias— y en aquellos edificios en los que es necesaria la producción simultánea de energía eléctrica y calor —centros comerciales, complejos turísticos, etc—.
La trigeneración surge a partir de la suma de una nueva demanda: el frío. De este modo, al conjunto de sistemas de la cogeneración se le añade un elemento adicional, una máquina de absorción. ¿Cómo se incorpora este elemento al proceso y da como resultado la trigeneración?
¿Cómo funciona la trigeneración?
La trigeneración está compuesta por tres sistemas:
- El sistema encargado de obtener la energía. Este sistema depende, evidentemente, de que combustible o fuente de energía estemos aprovechando. Por poner un ejemplo, en el caso de la energía solar como fuente primaria, estaríamos hablando de colectores solares.
- El sistema motriz primario. Es el encargado de producir la electricidad y emitir el calor residual, que puede aprovechar más tarde la máquina de absorción. Algunos ejemplos podrían ser una turbina de gas, un motor de combustión interna tradicional e incluso un motor Stirling.
- El sistema de generación de frío —o máquina de absorción—. Una vez que ya tenemos la electricidad y el calor, también podemos obtener frío gracias a este último.
Ventajas de este proceso
La principal ventaja de la trigeneración es el aprovechamiento del calor residual fruto de la producción de energía eléctrica. Además, al tratarse habitualmente de una producción de energía «in-situ», no es necesario transportar la energía grandes distancias ni transformarla, por lo que a penas se producen pérdidas.
Si para la trigeneración nos servimos de fuentes de energía renovables, no solo obtenemos independencia con respecto a la red de suministro tradicional y los combustibles fósiles, dañinos para el medioambiente; también ahorramos mucha energía, alcanzando una eficiencia de hasta el 90 %, y ayudamos a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, como el CO2.
Como hemos podido comprobar, la trigeneración es un sistema de producción de energía a tres bandas que representa y lleva por bandera la eficiencia energética; un paso más hacia un modelo de desarrollo y consumo energético sostenible, en el que prevalezca el autoconsumo y las fuentes de energía renovables y limpias.
