¿Sabías que tanto Madrid —puesto 21— como Barcelona —puesto 28— están entre las 30 ciudades más sostenibles del mundo? Seguramente no sepas qué hace de ellas unas ciudades sostenibles. Lo primero que nos viene a la cabeza es: reciclaje, ecología y energías limpias. Pero no es sólo es, las ciudades sostenibles van mucho más allá.
¿Quieres saber qué hace de ciudades como Madrid o Barcelona una ciudad sostenible? Hoy vamos a explicártelo todo.
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¿Qué es una ciudad sostenible?
Una ciudad sostenible es aquella que dentro de su estructura cuenta con una movilidad óptima, ahorro de energía y recursos hídricos y que cuenta con poca contaminación acústica. Además suelen tener grandes espacios verdes dispuestos para todos los ciudadanos.
¿Te suena alguna? Las cinco primeras ciudades clasificadas como sostenibles son: Londres, Estocolmo, Edimburgo, Singapur y Viena.
Ahora, ¿Cómo entrar en el ranking de las ciudades sostenibles?
Requisitos para lograr una ciudad sostenible
En el reporte de Arcadis “Índice de Ciudades sostenibles 2018” podemos ver cómo puntúan cada ciudad en base a unos valores. Estos valores son los objetivos promovidos por las Naciones Unidas: los ODS —Objetivos de Desarrollo Sostenible—. Se basan en tres pilares fundamentales: personas, beneficio y planeta.
Las ciudades sostenibles deben tener una alta calidad de vida y oportunidades sociales con el resto de países. Otro punto importante es la arquitectura bioclimática: ciudades diseñadas en función del clima en el que residen, aprovechando así el sol; la lluvia; el viento y la vegetación para disminuir el impacto ambiental de los edificios.
Por supuesto, debe utilizar recursos renovables y ser autosuficiente. Pero no todo es energía… Ser eficiente a nivel local, potenciar la sostenibilidad, igualdad, bienestar social o reducir el CO2 también son importantes. Es por eso que las Naciones Unidas se ha puesto como objetivo que las ciudades sean más sostenibles.
¿Por qué es importante crear más ciudades sostenibles?
Las ciudades y la población aumenta año tras año. Construir más es necesario pero… ¿Por qué no hacerlo de forma responsable? Tenemos la oportunidad de usar soluciones más ecológicas a problemas ya existentes, evitando así más daños en el medioambiente. Al final, todo suma.
Los edificios bioclimáticos tienen varios propósitos. El primero, reducir el impacto ambiental al construir. Segundo, estamos sumando más plantas al planeta. Y tercero, usamos el clima a nuestro favor: recogiendo agua de lluvia y usando el viento o el sol.
Además de dar la sensación de estar en contacto con la naturaleza. ¡Esas enredaderas colgantes son preciosas! Pero sobre todo, lo más importante: mejoran nuestra calidad de vida.
Ahora que ya sabes qué son las ciudades sostenibles, ¿No te gustaría vivir en un edificio bioclimático autosuficiente y rodeado de plantas? Aunque no podemos ayudarte a construir edificios, podemos echarte una mano si quieres que tu comunidad —o tu casa— sea autosuficiente.
Si te parece, podemos empezar por elegir una tarifa renovable que cubra tus necesidades con el mayor ahorro.
Contáctanos, ¡Estaremos encantados de ayudarte!
