El reciente estudio publicado por el IEB —Institut d’Economia de Barcelona— llamado La pobreza energética en España sitúa en el 8,3% el porcentaje de hogares españoles que sufren pobreza energética. Eso equivale a 1,5 millones —teniendo en cuenta que hay 18,4 millones en España— que no pueden pagar la factura de la luz, el agua o el gas.
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Cómo lo medimos
Hay varios factores que afectan: mantener la temperatura adecuada por calor o frío extremo, el retraso en el pago de las facturas, los cortes de suministro, los gastos energéticos desproporcionados… Muchos hogares españoles no pueden hacer frente a las facturas de luz, agua o gas de su vivienda. La mayoría de ellos se retrasan en el pago, otros terminan con un corte en el suministro por impago.
La mayoría de la pobreza energética en España se centra en Castilla-La Mancha —17,4%— y Castilla y León —12,8%—, mientras que en Cataluña se sitúa en el 7,4% siendo Canarias el más bajo —con menos del 5%—.Gracias al análisis podemos hacer un perfil de los hogares españoles en esta situación. Las probabilidades de sufrir pobreza energética aumentan cuando:
- Están en zonas rurales o con menos densidad de población.
- Pagan alquiler.
- Viven en edificios de 25 años o más.
- Son zonas de extremo calor o frío.
- Son hogares unipersonales o monoparentales, buena parte de ellos sustentado por mujeres.
El virus también afecta
El coronavirus no ha pasado desapercibido para nadie ni es el mejor aliado para hacer frente al problema. El confinamiento, el teletrabajo, los cierres… Todo ello ha hecho que aumente el número de horas que pasamos en casa, añadiendo un gasto extra que antes no existía. Es recomendable mejorar la eficiencia energética del hogar, gracias a ello podemos reducir entre 500 y 600 euros nuestra factura anual.
Muchas personas están en ERTE o han perdido sus empleos o negocios, castigando así a muchas familias y provocando daños irreparables en la economía: la pobreza energética en España va en aumento. Según el boletín de junio de 2020 de la CNMC —Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia— casi 1,3 millones de personas se benefician del bono social de electricidad. Esto supone un aumento del 1,1% comparado con el mes anterior.
Con esto podemos deducir que unos 665.000 no tienen hijos; más de 320.000 son familia numerosa; alrededor de 160.000 son pensionistas; unos 90.000 viven con un menor y más de 60.000 tienen dos hijos menores.
La mejoría se quedó en el pasado
Aunque los números mejoraban en 2019 en comparación con el año anterior, este año el coronavirus ha hecho mella en toda la sociedad. Los datos publicados por el MITECO —Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico— en noviembre son preocupantes. Un 7,6% no pudieron mantener una temperatura adecuada en su hogar para el invierno pasado. Aunque la cifra ha bajado —1,5% comparado con el año pasado y un 2,5% desde 2016-2019— aún sigue existiendo mucha pobreza energética en España.
Las probabilidades de que un hogar llegue a la categoría de pobreza energética va en aumento, siendo de un 9,3% cuando la persona cabeza de familia no tiene empleo. Hasta el 22% de los hogares españoles que no pueden hacer frente a los recibos pertenecen a personas sin empleo.
Desde Ahorreluz trabajamos cada día para ofrecer nuestro servicio gratuito de comparativa de tarifas a través del comparador energético. Esta herramienta permite a los usuarios realizar una búsqueda para conocer cuáles son las tarifas tanto de luz como de gas que mejor se ajustan a sus necesidades, pudiendo conseguir así un pequeño ahorro mensual.
